Scar Tissue

Hablar del móvil que promocionan estos señores en esta estampa ya daría mucho de sí. Porque el dichoso MOTORAZR V3i DG, además de impronunciable, es un item que desde este mismo momento considero detestable por ordinario, gañán y presuntuoso.
Nunca imaginé que existiera una mente más siniestra que la que maquinó la asociación entre telefonía móvil y cristales de Swarovski. Claro que si lo hacen con pantys... ¿Por qué no con un teléfono?.
Pero realmente, ¿Era necesario un móvil chapado en oro?. ¿Existe demanda de este tipo de gadgets más allá de Marbella o Montecarlo?.
Lo desconozco, y casi prefiero seguir manteniendo mi ingenuidad al respecto.
Ahora bien, el tema que nos ocupa y del que me he desviado por completo no es ese.
¿Qué es lo que resulta supuestamente inusual, transgresor, irreverente o discordante en dicho posado?.
¿Qué es lo que Stefano Gabbana luce presuntamente de forma intencionada en su rostro y no puede arreglar una simple sesión de Photoshop?.
¿Acaso es esto y debo preocuparme?: Es lo primero en lo que reparé ayer por la tarde a la hora del café cuando yendo con mis compañeros, me topé con una valla publicitaria que exhibía el cartel de marras.
Y entonces he recordado que hará un par de años allá en Japón -¿Dónde si no?- era muy trendy lucir cicatrices y magulladuras.
Cierto es que la fama cuesta y que no gain without pain. Que para presumir hay que sufrir, en definitiva. Pero someterse a episodios de dolor, ya sea leve o lacerante, para semejante frivolidad ya es pasarse de la raya.

O no, quién sabe. Tal vez el señor Gabbana no comparte mi opinión y es por eso que accede a ser retratado de esta guisa.
Por eso, para tal menester el catálogo de cicatrices a la carta de la imagen de unas líneas más arriba.
Inofensivas calcomanías para los que gustan de vivir peligrosamente sin morir en el intento. Para toda ocasión, evento y estilismo.
Este post va dedicado a mi madre, que nunca pierde la ocasión de afirmar que en estos tiempos que corren la gente está cansada de todo.
Y qué razón tiene.

Slave To The Rhythm

La creación definitiva, el invento que todos estábamos esperando. Visto aquí en mi primera dosis de insomnio post vacacional.

El Song Tapper tenía que ser inventado y materializarse entre nosotros.

¿Quién a lo largo de estos años no le ha pedido a internet una interfaz sensorial, por así decirlo, a la que cantarle al oído todas aquellas tonadillas de las que desconocía título e intérprete?.

Ahora, para desvelar esas pequeñas incógnitas sólo nos queda darle a la barra espaciadora al compás de esa melodía atormentadora que reside en nuestra cabeza resistiéndose a ser identificada.

Teclear, ya no con virtuosismo, sino con un mínimo de la destreza de la que sin ir más lejos, una servidora carece totalmente.

Porque me da la sensación de que me queda bastante para ser una autoridad en la materia, ya que no creo que sea muy normal que el programa confunda Massive Attack con Duncan Dhu.

No sé, o el programa es muy malo o habrá que aplicarse.

Aunque hay que decir que tararear "Teardrop" con el teclado se hace, cuando menos, cuesta arriba.

Off topic:

Curioso esto de "tararear con el teclado", en lo sucesivo prometo no releer mientras escribo.

On topic:

Apuesto que para el cartel del Sonar del año que viene ya habrá jam sessions de esta disciplina. Y a poder ser, con algún que otro theremin o didgeridoo acompañando, por lo underground más que nada.

Aunque nunca se sabe, siempre habrá quien prefiera el pianito de los Doors.

Isolation

Esto es lo que me pasa por husmear en blogs ajenos estando de vacaciones, teniendo en cuenta dos variables:

1: La ociosidad es el patio donde juega el diablo.

2: Sé de alguien que tiene la culpa de que me meta en estos berenjenales.

Dicho esto, mi plácida y sosegada existencia transcurría hasta el momento entre Nouvelle Vague y Morrissey. Rajoy Division ha sido el revulsivo.

Me había prometido a mí misma abandonar malos hábitos tales como ponderar las discutibles cualidades de Blas y las Astrales, Superputa, Los Petersellers, Richy Bastante, Putilatex y, si me apuran, Señor Coconut.

Había desestimado la idea hacer una antología de folklore marginal, aunque fuera únicamente para consumo propio.

Me había casi autoconvencido de que no deberían gustarme Glamour To Kill y Las Nancys Rubias.

Pero todo esfuerzo ha resultado infructuoso. Ya ni siquiera me consuela coreografiar ciertas tonadillas de los Joy tal cual hizo Miguel Bosé con Amante Bandido. No es lo suficientemente aberrante como para estar a la altura de este colectivo de artistas.

VISIONARIOS!.

You'll Never Walk Alone

A Dios Rogando Y Con El Mazo Dando

De un tiempo a esta parte, Mel Gibson es un señor que me da grima.

Tal vez me dí cuenta tarde, lo admito. Pero lo que hoy nos ocupa creo que ya es la gota que colma el vaso, porque parece ser que este gran prohombre de la cristiandad fue detenido el pasado viernes en Los Angeles por conducción temeraria en estado de embriaguez.

Es una buena muestra de sensatez, firmeza y amor al prójimo eso de ir conduciendo por Malibú a 160 Km/h y con una botella de tequila a modo de copiloto.

Y también es de ser buen cristiano soltar una retahila de insultos machistas, racistas y antisemitas mientras la policía te lleva esposado al calabozo.

No obstante y previo pago de su fianza, le ha faltado tiempo para redimirse e ingresar de inmediato en un centro de desintoxicación como una Kate Moss cualquiera como si nada hubiera ocurrido. ¿Será que es cierto eso de que Dios aprieta pero no ahoga?.

San Sebastián

Posiblemente, el mejor lugar del mundo para comprarse unas Converse Re-Issue si tienes los pies destrozados de tanto andar. Y si para colmo es en domingo y en buena compañía, mucho mejor.
De todas formas, cualquier excusa es buena a la hora de comprar calzado.
Próximamente, breve review de EL CONCIERTO. Que dicho sea de paso, ya estoy tardando bastante.

Iberia Sumergida

No sé si fue la peor huelga de la historia de la aviación comercial, pero Frío de Verano estuvo alí para verlo... Y maldita la hora.

Con el mal karma que me generó el hecho de esperar todo un día para que al final cancelasen el vuelo, como que no me quedan ya ni ganas de hablar y/o postear fotos del concierto de Depeche Mode en San Sebastián el pasado día 22.

Volviendo a los señores de Iberia Handling, otra cosa no, pero podríamos estar asistiendo al nacimiento de un nuevo deporte de aventura que consistiría en saltar por encima de los mostradores de facturación sorteando aglomeraciones de gente sudorosa y encolerizada, el cordón policial y montañas de maletas perdidas y abandonadas.

La experiencia no es que me entusiasmara en su momento, pero como mínimo pude recuperar mi equipaje en un escenario que se asemejaba más a una cochambrosa estación de tren años 50 que a otra cosa.

A semejante estampa tal vez le hubiera añadido gente cargada con gallinas y cabras por hacerla más auténtica y adecuada.

Pero contrarresta el hecho de que a las puertas de la terminal se encontraba un camión repartiendo botellines de agua, como si eso fuera a calmar los ánimos. Qué cosas.