Pasen Y Lean (Iberia Sumergida Reprise)

Y si alguien me lee, se preguntará por qué hoy vuelvo a dar el tostón con Iberia.
Hoy ha sido un día con cierto equilibrio, decantándose más bien hacia el extremo chungo. Pero lo que no soporto es que me insulten.
Hoy en mi buzón he recibido, por un lado y de parte de mi aseguradora, un talonario con 24 lavados de coche gratis durante todo 2007. Y eso, por supuesto, no es lo que me ha hecho montar en cólera.
Esto es lo que no me ha alegrado tanto:

Si estaba resentida con el tema, esta tal Cristina Trapote, que tiene la poca vergüenza de firmar esta carta, ha conseguido que mi hartazgo sea aún mayor si cabe.

Ahora resulta que, de haber querido, hubiera llegado a mi destino ese día porque desde primera hora del viernes 28 se dispusieron medidas extraordinarias para resolver la situación en el menor tiempo posible.

El mega-aplec de la pista resulta que no fue una huelga salvaje, sino un suceso causado por circunstancias extraordinarias o imprevisibles, rollo huracán o tormenta tropical.

Con lo cual no le pidas peras al olmo, chata, que por no haber podido asistir a una boda y pasarte el día en el aeropuerto, no procede indemnización.

Si es que de verdad, no sé de qué se queja la gente. Va la Duquesa de Alba y su séquito con cuarenta maletas e Iberia les acomoda sin ningún problema dejando las maletas de todo un pasaje en tierra. ¡Así de fácil!.

Menos mal que se dignaron a devolverme el importe de los billetes con cara de asco, eso sí.

Pero casi mejor eso que no que me los cambiaran para volar -o por lo menos intentarlo- de nuevo con ellos.

Pero bueno, no tengo otra cosa mejor que hacer que gastar unos litros de gasolina desde aquí hasta El Prat para ir a presentarles unos cuantos tickets del tren Sants - Aeropuerto y el del pollo a l'ast que me comí ese día.

Los de los taxis no los pedí... qué mal. Con ese dinero no me llegaría para irme de compras a Gucci, pero menos da una piedra.

Y eso que lo normal de las personas que en pleno ataque de nervios ven que les cancelan un vuelo y salen despavoridas maletas en ristre de una terminal colapsada de gente encolerizada, es pedir el recibito al taxista.

Esperemos que Aena tenga la última palabra... Veremos.